Hace ya varias décadas Taiwán cambio drásticamente su política de desarrollo económico, cimentada principalmente en unos pocos cultivos extensivos; ese cambio, consistió en invertir vigorosamente en industria, electrónica y tecnologías de la información, también impulsó la explotación de cultivos intensivos.
La decisión de eliminar la explotación extensiva de caña de azúcar, por ejemplo, sucedió principalmente por el estancamiento de precios a nivel mundial, el incremento del costo de mano de obra local y la importación.
Es por eso que el cultivo de caña de azúcar, en estos días, únicamente se planta en pequeñas parcelas para consumo fresco o transformarlo en confitería artesanal. Los tutores, en parcelas, para mantener verticalidad de plantas y facilitar cosecha y pelado, son usuales.
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