Hace
algunos días, participamos en una capacitación ofrecida por el Departamento de Gestión
de Hoteles y Restaurantes de nuestra universidad. Dos platos eran parte de la instrucción:
cocina mexicana y cocina coreana. Además de nuestro interés por aprender a
cocinar dos comidas exquisitas y muy populares, pues también la participación nos
ayudó a conocer docentes, y más instalaciones y equipos en el campus de nuestra universidad.
Para
participar en la capacitación, semanas antes, nos registramos en el sitio web
de la universidad. De esa manera, los organizadores conocían, con anticipación,
quienes participaríamos y la cantidad de ingredientes necesarios. El uso de cacerolas, cocinas, y utensilios; al igual que las porciones
de carnes, frijoles, verduras y aceites; junto con la demostración, todo fue proveído
de manera gratuita a estudiantes, empleados y familiares. Después de la presentación,
cada grupo cocino sus propios platos; al finalizar, todos los platos los
trasladamos a la pequeña sala-restaurante para degustaciones. La comida fue nuestra.
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| Nuestros platos |
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